Fue columnista en los semanarios ‘La Opinión’ y ‘La Voz del Sud’, y amiga entrañable de Carlos Juan Rodríguez Saá, a quien recordó en innumerables poemas, como ‘Las palabras que esperan’. También fue amiga y un pilar fundamental para su madre Antonia “Tona” Salino, quien la recordará por siempre. “Se me fue Raquel, una amiga como pocas. Es un día tristísimo para todos los que la queríamos, especialmente para sus hijos”, dijo con dolor Salino.
Desde hace unos años decidió instalarse en su casa en la localidad de El Potrero de los Funes. Entre sus últimas publicaciones, se destaca el libro “El Rector”, pieza que trae a la memoria el relevante legado que dejaron los cinco períodos de gestión del primer rector de la Universidad Nacional de San Luis, elegido democráticamente en Asamblea Universitaria, Alberto Puchmüller, en donde ella fue la responsable de la Dirección de Prensa y acompañó a esa gestión en la fundación de FM Universidad.
Sus amigos la recuerdan como una mujer de mucho carácter y una intelectual valiosa que tuvo una nutrida participación en diferentes ámbitos. Estuvo en el diario El Puntal San Luis y fue una de las primeras mujeres en escribir sobre los derechos humanos además de haber editado libros de poesía.
Entre los numerosos escritos de Raquel Weinstock
se destaca ‘No pases de largo’ dedicado para su hija Rayza, quien lo compartió en sus redes sociales:
“Cuando veas un viejo sonriente junto a un niño, una luna llena, un duraznero que florece, unos ojos inevitables o el sabor de una uva que estalla entre tus dientes, es la vida que te mira.
No dejes que nada interrumpa las madrugadas inolvidables, ni tu risa incontenible, ni los caminos que elijas, aun los que no te llevan a ninguna parte, porque en su recorrido descubrirás vida.
Te sorprenderá el lodo, te dolerá el dolor de los otros. Que nadie te marque moretones en el alma, no te acerques a los abismos porque son sólo eso, están vacíos de sueños. No te detengas en cuerpos de hojalata pintada, de marquetería. No desperdicies abrazos para que puedas conocer intacta la miel de los besos eternos, aunque yo no sepa si existen. Que quien pronuncie tu nombre sea como quien arrulla a un niño con una canción de cuna.
No bajes los brazos salvo para alzar un fruto o un buen recuerdo. Tal vez encuentres un río sin agua, pero tiene vestigios de que la tuvo. O una casa sin llaves y gente sin casas, curtidos, olvidados, y eso también es la vida que te está mirando, y no pases de largo.
No siempre la soledad es un pájaro herido, a veces tiene el rostro de un espejo que nos deja mirarnos transparentes, aunque nos resulte insolente o insostenible.
Eso somos, tan frágiles como un silencio.
No muerdas el corazón de lo injusto, sólo encuentra el modo más leve de pisarlo, para limpiar el camino que te llama, las voces dulces que te nombran. Pero sobre todo, no pases nunca de largo por la vida”, publicó Rayza.
Según informaron desde la empresa Parque de la Quebrada los restos de Raquel Weinstock serán velados en la sala ubicada en San Juan 1291 y el sepelio se realizará mañana, martes 25 de febrero a las 9.30 en el cementerio Parque de la Quebrada.